Libre
Ricardo Darín interpreta en El aura a un hombre que sufre epilepsia. Llama la atención lo que cuenta de sus ataques, los describe como segundos de libertad donde no existe ninguna alternativa, nada que elegir. Cualquiera pensaría lo contrario, que es más libre quien más opciones tiene. Tal vez dejarse llevar por la corriente del día sea otra forma de serlo, menos conocida.
Navidad
"Es un señor clásico, pero canchero -le explico al pibe que me atiende- anda mucho en bicicleta, tiene que ser algo fresco". Al lado mío, una jovencita pregunta a otro vendedor si no hay bermudas más económicos y ensaya después su propia descripción: "Tiene un cuerpo raro, todo le queda mal". Ahí estamos las dos, con el mismo amor.
Me regalo Mal comidos, de Soledad Barruti. La cola para pagar, en esta mañana del 24, es exitosamente larga. Mientras la fila avanza, leo la introducción del libro. Con una mezcla de satisfacción y escalofrío siento en los huesos su condición de imprescindible.
Pirotecnia
Se nota la influencia de la comunidad china, hay más arabescos en el aire que antes. Se nota, también, la competencia de siempre: quién hace más ruido, quién lanza más luces. A ver quién es el que la tiene más larga, dice la canción. Esta vez no compré el globo aerostático de otras fiestas. Un poco por olvido, otro poco porque supe de una palmera que se incendió por completo y no pudo recuperarse.
Alerta roja
Qué será de nosotros cuando el clima castigue con temperaturas bajo cero o un sol impiadoso (nos llegan mails alarmantes sobre el Polo Norte derritiéndose). Quiénes serán los sobrevivientes, cuáles los trabajos necesarios. Los generadores eléctricos que sugieren implementar en los edificios altos tienen el tamaño de un contenedor de puerto. Más contaminación, más gasto. En vez de resolver el problema de las empresas que no cumplen, buscan aumentarlo. Un panel solar puede hacer funcionar una bomba de agua, por ejemplo. Energía solar, energía eólica como alternativas.
Los shoppings son grandes consumidores de energía, sería de agradecer que atendieran de 8 a 20 hs, que usaran la luz diurna. Los carteles públicos, vidrieras, bingos y casinos gastan fortunas porque todos se iluminan con el sólo propósito de atraer a la gente. Ochenta autos avanzan en una cuadra. Avanzan es un decir, si van a paso de hombre... Esos ochenta conductores, que viajan solos, podrían optar por el transporte público. Si sólo circulase el colectivo, el tránsito sería fluído. No son cosas que no sepamos, la información nos llega diariamente. El sábado pasado vi, a las siete y monedas y desde el colectivo, a un hombre mayor a las puertas de un kiosco. Tenía puestos musculosa, bermudas, medias de vestir hasta las rodillas y chancletas. Su pierna izquierda se veía grotescamente engrosada, roja, posiblemente diabética. Y ahí estaba él, abriendo otro paquete de cigarrillos en la vereda misma.
Somos como ese fumador, no asociamos las alertas rojas con nuestra conducta.
"El Aura" es sin duda la película argentina que más me ha gustado en la última década. Una gran pérdida la de Fabián Bielinski.
ResponderEliminarOdio toda pirotecnia, me parece una estupidez absoluta, además del peligro está el ruido, insoportable.
Lo de la energía es como Ud. dice, yo sostengo que los argentinos no somos (simplificando y generalizando) especialmente solidarios, lo opuesto a los japoneses, por dar un contraejemplo.
Saludos y buen fin de año, Maia.
Que el costo sea la epilepsia no es grato, pero la idea de no poder elegir (porque eso que va sobrevenir es inevitable) es liberadora, sí. ... Tener que estar "eligiendo" todo el día, todo el tiempo (desde qué ponerse o qué comer a cuestiones menos amables) es agotador.
ResponderEliminarMe parece que hojeé Mal comidos... y me desesperó un poco (ni siquiera podemos confiar en las frutas y los vegetales, ay). ¿Es eso?...
No soporto la pirotecnia (vivo sobresaltándome con esas bobas estampidas ), aunque debo confesar mi debilidad por las estrellitas... No hacen ruido y esos segundos de resplandor, no sé por qué, me hacen feliz.
Yo ni siquiera sé qué será de nosotros si estas temperaturas persisten cinco días más :(
Es verdad, no asociamos las alertas rojas con lo que hacemos y somos poco solidarios, como dice Rob; en todo caso, nos gusta sentirnos solidarios cuando esa "generosidad" es muy visible o tiene mucho marketing, cuando la tele, la radio y todos hablan de eso, muchos se sienten la madre Teresa de Calcuta llevando alguna toalla, alguna ropa, algunos fideos o arroces para la pobre gente que se inundó. Pero muchos de ellos no serían capaces de bajar el aire acondicionado, o tomar un colectivo o etc, etc, etc. Esa solidaridad no se ve, ¿qué gracia tiene?
En fin, buen fin de año Maia, y mucha alegría e inspiración para el que viene.
Es tanto lío armar el equipo (El Equipo) para verlas, que se han juntado en casa muchas películas viejas. Así y todo, acerté a comprar "La chispa de la vida" que recién ahora llega al cine, y con buena crítica. Me gustó El aura. Oscura, como casi todas las de Darín.
ResponderEliminarEs cierto que no somos solidarios. Ayer vi un programa sobre el cuidado del agua y fui a hablar con la encargada de nuestro edificio. Le expliqué que en Sarmiento 2040 distribuyen gratis "pistolas" para acoplar a las mangueras (ya que no pueden barrer una hojita o un pucho con la escoba, al menos que no desperdicien tanta agua). Me puso cara de asquito, mmm, sí, ella ya sabía, el sindicato las distribuye y qué sé yo, pero esas pistolas no sirven, no se puede hacer nada, tiene órdenes de arriba. ¿Órdenes de qué? De limpiar como limpia. ¡Me dio una bronca!
Buen fin de año y mejor comienzo, Rob.
Somos el resultado de nuestras opciones, leí alguna vez. Qué responsabilidad.
ResponderEliminarCómprese (sepa que cuando entro en confianza los "usteo") ese libro. No trata sólo de lo que comemos, sino de "...la corrupción, el delito, la experimentación científica, la especulación financiera, la debilidad del Estado ante las corporaciones, el cambio climático, el desequilibrio ecológico y las convulsiones sociales". Muy, muy interesante, no pude terminar siquiera el primer capítulo porque me sacaron el libro de las manos.
Qué calor, Betina. Me parece que voy a sacar a pasear mi sombrero de feria y al que no le guste que no mire. Los otros días vi por Corrientes a una señora con una sombrilla de papel, de esas chinas. Si me pregunta a mí, me gustaría blanca, de puntillas.
Lo mejor para ud en el nuevo año, felicidad, mucha.
Yo también quisiera una blanca de puntillas! ( y si tiene otro sombrero de feria, prestemeló, quiere? :)
EliminarLos mejores sombreros son los que tienen historia. Por la feria pasa un muchacho vendiendo panes rellenos, usa un sombrero genial, todo hecho bolsa. Que lo tire, le aconsejan los amigos. Ni se te ocurra, le digo yo. ¿Vio Thelma y Louise? No por nada le roban el sombrero al camionero guarro, es un auténtico trofeo.
ResponderEliminarTal cual. Las cosas sin historia son para las vidrieras, las revistas de decoración y las publicidades. No, que no tire el sombrero el chico de la feria (aunque las medias, las toallas y otras cosas con historia mejor desecharlas :)
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