VERSÍCULO 41
Un gran erudito oye hablar del Tao
e inicia una practica diligente.
Un erudito corriente oye hablar del Tao
y retiene algo y se pierde algo.
Un erudito inferior oye hablar del Tao
y ruge de risa.
Sin esa risa, no sería el Tao.
Hay dichos provechosos acerca de esto:
el camino de la iluminación parece oscuro,
avanzar parece una retirada,
el camino fácil parece difícil,
el verdadero poder parece débil,
la auténtica pureza parece manchada,
la verdadera claridad parece oscura,
el arte más grande parece poco elaborado,
el amor más grande parece indiferente,
la mayor sabiduría parece infantil.
El Tao está oculto y no tiene nombre.
El Tao por sí solo nutre
y hace que todo se cumpla.
VERSÍCULO 48
Aprender consiste en acumular día a día
La práctica del Tao consiste en reducir día a día.
Reducir y reducir hasta no hacer nada.
Cuando no se hace nada, no se deja nada sin hacer.
La verdadera maestría se puede adquirir
dejando que las cosas sigan su camino.
No se gana nada interfiriendo.
¿Se limitan a ser?
Si hay auspiciantes que paguen las cuentas, obvio, me limito a ser!
ResponderEliminarLe transcribo un texto que llevo en mi cartera. De Chopra, si mal no recuerdo.
ResponderEliminarDeseo actuar con el menor esfuerzo en todas las circunstancias.
Esta afirmación se refiere al hecho de actuar desde la conciencia pura. La conciencia pura es igual al nivel de conciencia en que se encuentra actualmente, con la diferencia de que su alcance es infinito. La conciencia pura no está limitada en el tiempo; no conoce impedimentos. Ante cualquier deseo suyo, el alma conoce todas las soluciones, las cuales varían dependiendo de la facilidad con la cual se pueden alcanzar. Si desea un automóvil nuevo, una posibilidad es que aparezca milagrosamente al frente de su casa, pero es más probable el resultado de poder trabajar más para conseguir el dinero para comprarlo. Sin embargo, el ego, al rechazar la posibilidad de los milagros, ha optado por el camino de la lucha, haciendo caso omiso del poder infinito del espíritu. Para cambiar esta situación, cambie sus expectativas. Pida alcanzar sus deseos con el menor esfuerzo. El espíritu endosará este cambio cada vez en la medida en que usted aprenda a vivir sin luchar. Con el tiempo tendrá que hacer cada vez menos para conseguir cada vez más. En el plano del alma usted ya posee todo sin necesidad de hacer nada.
Qué lejos estoy del Tao... Aunque lo del menor esfuerzo - para lo que fuere - siempre me ha tentado, desde niño. Si no fuera por el detalle que apunta Nayru...
ResponderEliminarSaludos, Maia.
¿Vio esos días que salen redondos? Hoy me propuse que fuera así. Esperé en mi barrio un colectivo vacío, para viajar sentada.
EliminarUn coso me tosió al lado hasta Once. Cada dos segundos, recontra apestado. Lo miré dos o tres veces, pero qué iba a decirle. Cuando él bajó, subió una mujer oliendo a... jamones, se ve que llevaba algo de eso en el bolso o la mochila. Se acercó trabajosamente hasta donde yo estaba y me pidió el asiento.
-¿Cómo?
-Que me des el asiento, tengo carnet de discapacitada.
Ah, qué torcido la miré. Me paré de mala gana.
-Tenés que pedirlo adelante.
¿Por qué a mí? ¿Por qué a mí, sentada en un asiento individual casi al fondo del colectivo? Ay Chopra, Chopra...
Difícil, viviendo en este mundo. Al menos en la parte del mundo donde, por lo general general, todo se compra y se vende, todo son transacciones, es tan abrumador... Sin embargo, no me siento tan lejos de la idea de limitarme a "ser". De hecho, son pocas las cosas materiales que necesito para sentirme bien. No soy ambiciosa, en los términos en los que suelen serlo la mayoría de las personas. Eso me gusta, pero a veces me hace sentir medio descolocada, como que no encajo del todo...Claramente, lo que me hace feliz- siempre fue así- son las cosas que no se compran ni se venden. Me leo y sueno a discurso new age básico, pero es así. Quizás podría decirlo de un modo más sutil, ingenioso, menos obvio, pero ¿para qué el esfuerzo? Es tan simple como eso.
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=15eRnTJ4NzI
Abrumador es la palabra. A veces, bastantes, se vuelve doloroso. Parecería que las relaciones funcionan siempre y cuando uno "pueda". Salir a comer, ir a ver un espectáculo o lo que sea. Y a veces, bastantes, andamos con el manguito justo.
ResponderEliminarTengo una compañera de feria que alquila y estudia Bellas Artes en provincia. Usa ropa que le regalan y anda siempre cortando clavos para pagar las cuentas. ¿Es feliz? Sí, hace lo que le gusta. Es un precio alto el que paga, anda ojerosa y cansada y muchas veces angustiada por la falta de ventas. Dejó un laburo muy bien pago en una agencia de publicidad para ser artesana. Eligió. Es dueña de su tiempo, es su propia jefa. Y no desaprovecha su talento natural, el don que le fue dado (con el que dicen que nacemos todos).
"Ay Chopra Chopra" jajaja. A ver, hay algo que no entiendo. Digame que no es verdad que Chopra dice que si desea un auto nuevo existe la posibilidad de que aparezca frente a su puerta, con el 08 firmado y listo para transferirlo a su nombre, por favor. En el plano espiritual vaya y pase, pero en el material?
ResponderEliminarPor otro lado, ¿pedir alcanzar los deseos con el menor esfuerzo? Hay un dicho que dice "lo que cuesta vale", me quedo con ese.
No tan literalmente, supongo. Querrá decir que uno podría sacárselo en un sorteo o tal vez heredarlo.
EliminarMuchos cultores de estas corrientes sostienen que podemos llegar a ser "materializadores". Es decir, desear algo y conseguir que se presente en el universo físico. Yo creo en eso, sabe? Me pasa bastante seguido. Por ejemplo, el sábado encontré una libreta de direcciones, con el teléfono desactualizado de una vieja amiga de mamá. "Qué pena no poder explicarle que me robaron el celular y que no la llamé porque no tengo su número", pensé entonces. El domingo pasó por la feria con otra mujer y se detuvo ante el puesto, sin saber que era el mío. Cositas así.
Dyer (Tus zonas erróneas) contaba de una herramienta muy específica que necesitaba para realizar un arreglo hogareño, salió a comprarla y la encontró en la calle. Nueva. Ah, qué orgulloso se puso. "Soy un materializador", le contó a todo el que quiso escucharlo.
Pruebe, total ¿qué pierde?
Necesito un novio... Materialícemelo amiga!!!
ResponderEliminarNanana, después vienen los reclamos. Hágase responsable, mija.
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